Sólo hace falta que alguien esté ahí para escuchar

Presencia del analista,* término que Lacan utiliza para agujerear las concepciones que se plantean los analistas de la época con respecto a su práctica, advirtiendo que sería un error reducir el alcance de ese “hermoso término” intentandoenumerar y estandarizar las actitudes y efectos que se esperan de un analista en su práctica.

Que más bien el alcance del término está en la coherencia que aporta, cuando manifiesta que no es otra cosa que la suma de los efectos de la palabra sobre un sujeto en su recorrido analítico y que la propia presencia del analista es una manifestación del inconsciente, de lo pulsional, en tanto soporta, en el movimiento transferencial, la función de objeto a.

La presencia del analista se puede poner de manifiesto en un sueño, como en el caso de una sujeto quien al comienzo de su análisis, sueña que Puck la invita a participar en una gran cena con varios comensales. Sus asociaciones remiten a la pieza de Shakespeare”Sueño de una noche de verano“: Puck es el bufón del rey, el personaje que causa los equívocos y enredos que ocurren en el bosque, al inocular un líquido en los ojos de quiénes duermen para que se enamoren del primer ser que vean al despertar. Es una pieza, en la que hadas y duendes forman un cortejo que influye en la vida y el amor de los humanos.

Es una manera de dar cuenta de la presencia del analista inseparable de los enredos y jugarretas del inconsciente formulado por Lacan. Sólo hace falta que alguien esté ahí para escuchar.