Guayaquil – 20 de octubre de 2016
Tute
Letras en línea
Con esta nueva entrega, Letras en línea continúa con la propuesta de invitar al diálogo a dos colegas, en “una conversación por escrito”. Esta vez, los invitados son Alejandro Reinoso (Chile) y Orlando Mejía (Bogotá), quienes dialogarán con Jacques Alain Miller a partir de una cita de su seminario Sutilezas analíticas.
Alejandro tomará como referencia la cita de Miller, para ir más allá, buscando acercarse a esa condición de la transferencia que ya Freud había subrayado: “motor y obstáculo” a la vez. De allí que considere dos momentos en la experiencia analítica, el primero, “gloria” de la transferencia, movilidad, cambios, efectos terapéuticos; y el otro, el del análisis que dura, allí donde se pone a prueba el deseo del analista.
Sacando provecho de la y de hysterización y de hystorización, para rescatar lo singular de cada quien, incluso la del analista, invitará a Orlando al diálogo. Invitación aceptada con gusto por nuestro colega de Bogotá, quien a partir del juego lacaniano ficción-fixión, retomará la doble vertiente de la transferencia, para orientarnos en lo que sería una dirección de la cura por la cual poder sortear esa condición de obstáculo inherente a la transferencia misma.
La experiencia de un AE será el broche con el que cerrará la oportunidad que el guante arrojado por Alejandro le desafiara con una simple letra y.
¡Buena lectura!
Susana Dicker
Alejandro Reinoso y orlando Mejía conversan
Miller– “La experiencia analítica comienza por la histerización del sujeto. ¡Y bien! (…) continúa también con la histerización del sujeto, y en la transferencia, es decir, que relata para ustedes, les teje una hystoria, por eso es una elucubración. Construye un saber que es una elucubración y pertenece al registro de la verdad por cuanto ésta tiene estructura de ficción”[1]
Susana Dicker– Nos gustaría que comentaras esta cita de Miller y que desarrolles si encuentras allí un nexo con el tema de nuestra conversación clínica: “La transferencia, motor y obstáculo”.
Alejandro Reinoso– La cita inicia con una distinción entre dos momentos de la experiencia analítica. El comienzo “se desarrolla en un atmósfera de revelación […] a partir del momento en que el sujeto hace el esfuerzo de trasladar el acontecimiento del pensamiento a la palabra”[2]. ¿Y cómo continúa la experiencia? “en un análisis que dura la revelación se hace más escasa, se detiene e incluso desaparece […] un análisis que dura pide atravesar el estancamiento, soportarlo, es decir, explorar los límites: la jaula delsinthome”[3]
¿Qué relación tiene la cita con el tema de nuestra Conversación Clínica: “La transferencia, motor y obstáculo”?
Ambos momentos acontecen bajo transferencia: el análisis que comienza está plagado de acontecimientos y mutaciones, “la transferencia es la palabra gloriosa para calificar esta mudanza”[4], marcada por el placer del analizante y del analista –dice Miller. En el análisis que dura la transferencia tiene otro tono: la repetición y lo inmóvil, con “el posible peso de los reproches que puede acarrear: Usted no hace nada para sacarme de ahí”[5] y donde el mismo Miller reflexiona sobre cómo sostenerse en ese lugar: “Y o aguanto, pero la cosa es saber cómo […] tengo a Lacan como compañero […] es esa mano la que encuentro para orientarme en esta selva oscura que es el análisis que dura”[6].
La histerización del sujeto es comienzo y continuidad de la experiencia analítica.
Lacan en el Prefacio a la edición inglesa del Seminario XI señala que el análisis
“está hecho de historia o lo que es lo mismo de histeria”[7], jugando con los términos “historia” e “histeria” en el neologismo “hystoria”. Así indica “en la cura hay que contar al analista”[8]. Para Miller “el análisis mismo, en primer lugar, es una hystoria.
De modo que un psicoanálisis tiene estructura de ficción puede decirse: es unahystoria, es decir, un relato, incluso una novela, con su continuidad, y ordenada según el deseo del Otro”[9].
Sí, esta hystorización está dirigida al Otro. Por ello la cita de Miller insiste: “…y en la transferencia, es decir, que relata para ustedes, les teje una historia”.
La historia hace referencia a la emergencia de la verdad (F unción y campo). El discurso de la histérica “se sitúa y ordena alrededor del síntoma”[10] el cual toma el valor dominante. La hystoria incluye la letra (y) que condensa la cifra de la estructura, que se lee pero que no se escucha y está referida a cada sujeto neurótico en su rasgo singular en la relación al discurso del Otro[11].
La hystorización no sólo compete al analizante. Lacan precisa, releyendo la máxima de la Proposición del 67, que el “analista no se hystoriza más que por sí mismo[12], ubicando la hystorización en el lugar de la autorización y propone que el pase es la “puesta a prueba de la hystorización del análisis”[14].
¿Qué significa entonces construir, bajo transferencia, un saber elucubración (hystoria) que tiene estructura de ficción?
Susana Dicker– Orlando, tienes aquí una pregunta interesante que Alejandro deja abierta y con la que te invita a un diálogo. Lo interesante es que Lacan ubique al pase como la “puesta a prueba de la hystorización del análisis”, cuando nos hemos acostumbrado a pensar esa hystorización para los inicios de un análisis.
Orlando Mejía– Ficción en sus dos acepciones homónimas ficción fantasía y ficción lo que fija, que Lacan condensa en el neologismo fixión, se anuda sin forzamiento a algunos de los conceptos enunciados por Alejandro Reinoso, en relación al saber.
Inicialmente el paciente trae sus ficciones fantasías, su historia, buscando ese saber que le supone al analista, esos S2 que completarían lo que falta por añadir al S1. Ahí es donde la transferencia motor se puede volver un obstáculoinsalvable, si caemos en la tentación de agregar esos S2 que pide el analizante; en cambio, si nos orientamos por lo Real, apuntando al goce y no al sentido justamente es aquí donde el corte, entre otros, opera apuntamos a que en un segundo tiempo de un análisis largo se pueda reducir ese S1 singular, letra que condensa la cifra de la estructura como nos recuerda Lacan, y que cada sujeto neurótico mediante su propia invención, elucubración de saber, hará oír esa voz áfona que ha sido su fixión.
Si el pase es la puesta a prueba de la hystorización de un análisis, evoco a Bernard Seynhaeve, en una conversación memorable en Bogotá en una Noche de Escuela, que pueden leer en nelbogota.blogspot.com.co, donde nos ilustra cómo un primer tiempo largo, 25 años, el inconsciente transferencial se nutría de S1S2 aún con los equívocos, requiriendo lo que Bernard llama <una intervención que comprometa el cuerpo del analista: una mirada, un gesto, una palabra…> para aislar ese S1, fuera de sentido, en su caso la frase “Usted ama demasiado sus fantasmas” (ficciones) y luego… no solamente saber hacer (savoir faire) sino arreglárselas con (savoir y faire), remarco la y como en hystorizar, que en su caso produce… un analista decidido!
En Guayaquil, con motivo de las Jornadas de la NEL, tendremos la oportunidad de discutir más sobre este y muchos más temas del psicoanálisis de orientación lacaniana de hoy.
¡Nos encontraremos allí!
NOTAS
- Miller, J. A.-: Sutilezas analíticas, p 133
- Op. Cit., p 11
- Op. cit., p 114 -115
- Op. cit., p 110
- Op. cit., p 115
- Ibid.
- Lacan, J., Prefacio a la edición inglesa del seminario 11, en Otros Escritos , p. 600.
- Op. Cit.,
- Miller, J. A- Sutilezas Analíticas, p 121
- Lacan, J.-Seminario XVII El reverso del psicoanálisis, p 46
- Bonneau, Ch.- Hystorización, en Scilicet UN Real para el Siglo XXI, p 174, Grama ediciones, Argentina 2014
- Lacan, J.- Prefacio a la edición Inglesa del Seminario 11, en Otros Escritos, p 600
- Op. Cit., p 601
Referencias bibliográficas sobre la transferencia
Miller, Jacques-Alain. La transferencia. El Sujeto supuesto Saber, en Seminarios en Caracas y Bogotá. Editorial Paidós, Buenos Aires, 2015. Pág. 220
Al respecto, es el psicoanalista quien representa el residuo de la operación analítica. Y Lacan elaboró esta teoría que hace del psicoanalista el desecho de toda la operación, y al mismo tiempo la causa que, en el fondo, desde siempre animaba el deseo del paciente.
Salman, Silvia. Lo que resta de la transferencia al final del análisis. En www.wapol.org/es/las_escuelas/ TemplateImpresion.asp?intPUBLI CACION
J.A.-Miller indica que si habría algo de la transferencia en la última enseñanza de Lacan, sería al nivel de lo que llama “efecto de agujero“. El analista en este caso agrega un vacío. No se refiere solamente al equívoco del sentido al que apunta la interpretación, sino a hacer resonar un vacío de significación.
Responsables del Boletín Letras en línea
- Susana Dicker
- Claudia Velásquez
- Fernando Gómez